2.17.2012

¿Qué puedo decir si todos callan? Escribo porque ya no tengo nada que decir. Escribo porque ya no hay nadie a quien escribir. Y el otro día en aquella plaza de Madrid respiré profundo para ver si todo aquel frío en mis huesos era cierto, para comprobar si toda aquella gente desconocida estaba viva, mientras caminaban por delante de mis ojos. Creí verte a esa hora en la que todos fingen, en la que todos se mienten y hacen creer a los demás que nunca lloran y que no les duele el tiempo. Creí verte, y te vi. Y pasé de largo, al final es lo único que se puede esperar de los demás, que pasen de largo sin decir nada, sin ni siquiera gritarte alguna porción de verdad. Te pido perdón por ser como los demás. Ahora fumo para cerciorarme de la levedad del humo y de todas las relaciones humanas. Y esta mañana mis manos eran hielo y trataban de encender aquel tabaco concentrado, pero en realidad yo sólo quería prender todos aquellos recuerdos que ya no recuerdo, y los besos que te di para olvidar el dolor de cada vuelta que da el mundo. Por aquí nadie habla de dolor ni de sangre, por aquí todos se miran sin mirarse, y hablan de mentiras para ver si son capaces de convertirlas en verdades. Y mientras apoyaba la cabeza en la pared del cuarto de baño de aquel edificio público, nos recordé, tú eras una cría y yo un niño que quería ser adulto, recordé todo lo que hicimos, y me pregunté si aún habrá críos que se tropiecen en sí mismos, prendidos por el deseo y por todo lo demás que sigue a las caricias y a los besos. Ahora hago esto porque ya no tengo nada que hacer. Y te escribo sin escribirte, porque quizá ya ni siquiera entiendas mi lenguaje. ¿Qué más puedo decir si ya no dices nada? Hay veces en las que el mundo pareciera que se va a caer mientras se asoma a su universo; entonces me entra algo de miedo y enciendo un cigarrillo mientras me digo que al menos la ceniza y el humo son algo cierto. Como si eso fuera un consuelo…
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4 comentarios:

  1. Me ha encantado tu manera de escribir.. tan dramática y directa a la vez.. Me quedo por aquí, siguiéndote, si no te importa.

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  2. qué bonita forma de hacerme reflexionar un domingo.

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  3. Me uno a las seguidoras... Me quedo... Por aquello de no ser como los demás y pasar de largo :)

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